El optar por callar y actuar con mensura puede promover la paz en nuestra vida. Mientras que hablar y proceder rápido , puede causar mas conflictos.
Cuando actuamos con prudencia la cautela y la moderación son la primera manifestación en nuestras acciones. Que importante es controlar nuestros impulsos con mensura , para poder manejar una templanza en las relaciones equilibradamente. Esto nos llevara a tener resultados sabios , para no afectar a alas otras personas.
Yo, la sabiduría, habito con la prudencia, y he hallado conocimiento y discreción. Proverbios 8:12.
La persona prudente es precavida , mantiene un respecto para con los demás, es una persona que no se pone en riesgo, siendo cauteloso en su forma de andar y de comunicar. De igual manera un hombre prudente construye su vida en fundamentos sólidos y es muy consciente de hacer las cosas teniendo lo necesario para realizarlas. Es metódico en sus gastos y controla bien sus finanzas. Será de igual manera un hombre temeroso de Dios, los cual sus principios estarán formados por la verdad de la vida. Como dice el proverbio.
Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos, guarda la prudencia y la discreción, y serán vida para tu alma, y adorno para tu cuello. Entonces andarás con seguridad por tu camino, y no tropezará tu pie. Cuando te acuestes no tendrás temor, sí, te acostarás y será dulce tu sueño. No temerás el pavor repentino, ni el ataque de los impíos cuando venga, porque el Señor será tu confianza, y guardará tu pie de ser apresado. Proverbios 3:26.
Lo contrario de ser prudente, es el imprudente, quien es el que se mete en lo que no le importa, su forma de proceder pone en riesgo su vida y la de los demás, ya que no es consiente de las causas; sus afánes lo predomina en una ansiedad para manifestar lo que desea sin medir consecuencias, habla sin pensar, esto lo lleva a cometer muchos errores que le saldrán caros. El imprudente es impulsivo y toma riesgos innecesarios, llevando su vida al derroche y gasta sin ganar lo que ha obtenido.
Pues la gente solo tendrá amor por sí misma y por su dinero. Serán fanfarrones y orgullosos, se burlarán de Dios, serán desobedientes a sus padres y malagradecidos. No considerarán nada sagrado. No amarán ni perdonarán; calumniarán a otros y no tendrán control propio. Serán crueles y odiarán lo que es bueno.Traicionarán a sus amigos, serán imprudentes, se llenarán de soberbia y amarán el placer en lugar de amar a Dios. 2 Timoteo 3:2-4
Ser prudentes nos lleva a tener una vida consiente de los he estamos haciendo, sabiendo respetar el tiempo para hablar lo que sentimos, vemos el momento adecuado para obrar sin apresurarse a cometer errores, ya que la seguridad conlleva a la Prudencia de la mano. La sabiduría y el entendimiento hacen que refrene su lengua y evitar decir cosas que podría lamentarse de haberlas dicho. Por esto te recomiendo antes de actuar. Detente, piensa , actúa y habla. Así obtendrás esa virtud que te llevará a la razón y podrás discernir todas las circunstancia verdaderas, para elegir los medios rectos y seguros para lograrlos; entre ellos andar por el buen camino que Dios traza para una vida plena en su voluntad. Esta traerá paz en todo lo que realices o hables. Por esto la prudencia ayuda a “vivir la verdad en nuestra vida”. Es esa disposición de nuestro espíritu, conscientemente formada, que nos inclina a escoger siempre el bien y, además, a atinar en la elección del mismo, en las circunstancias en las cuales no aparece tan claro cuál es el bien.
ORACIÓN.
Forma oh Dios en mi vida la capacidad de ser prudente, sabiendo que estaré seguro del tiempo y el momento para proceder y actuar, para respetar y amar a cada persona que esté a mi lado. Amén.