El uso de la razón nos lleva a poder encontrar el camino al dialogo, por el cual podremos aprender a ceder en nuestras propuestas, sin afectar al otro. Sin aprender a escuchar, no obtendremos un resultado positivo.
Era una vez dos jovenes que se hicieron tan pero tan amiguitas que no podían pasar un día sin la compañía de la otra, hasta que cierto día un pequeño desliz entre ambas puso a prueba su hermosa amistad: – Hoy jugaremos a lo que yo quiera – le dijo uno de ellas a la otra. A lo que la otra contesto: – Te equivocas eso lo decidiré solo yo. Y así con tales posturas, ambas se empecinaron en sus caprichos por muchas horas y sin llegar a un acuerdo. Luego de discutir por un largo rato, las dos jovenes amigas por fin entraron en razón y una de ella dijo: -Dejemos los juegos por hoy y encontremos otra manera de llegar a un acuerdo. Y diciendo estas palabras ambas acordaron alternarse diariamente y que cada una decidiese por un día entero que juegos jugar. De esta manera no hubo más problemas y conflictos y conservaron una linda amistad hasta la muerte.
Las propuestas parten de mejorar los acuerdos. Son los ellas las que permiten poder llegar a una relación estable, cuando se determinan en ambos lados. El diálogo comienza en una comunicación y la comprensión de ambas partes, para poder fomentar un acuerdo tranquilo y apacible. Saber escuchar y tener la obcion de que te escuchen, es mejor que mil palabras que se las lleva el viento. Para poder llegar a un acuerdo equilibrado hay que escuchar las dos partes y así podrás llegar a una buena conclusión.
El primero que habla en la corte parece tener la razón, hasta que comienza el interrogatorio. Tirar una moneda puede acabar con la disputa; resuelve los desacuerdos entre grandes oponentes. Un amigo ofendido es más difícil de recuperar que una ciudad fortificada. Las disputas separan a los amigos como un portón cerrado con rejas. Proverbios 18:17-19
No te encierres en tu propia opinion, aprende a escuchar y así te podrás entender y ponerte de acuerdo. Solo los que se hacen los sordos, no aprenden de la vida.
¿Pueden dos caminar juntos sin estar de acuerdo adonde van?. ¿Ruge un león en un matorral sin antes encontrar a una víctima? . ¿Gruñe un león joven en su guarida sin antes agarrar a su presa?. Amós 3:3-4
El término acuerdo dispone de un uso recurrente en nuestra lengua y que en casi todas sus referencias implica la conformidad o trato al que varias personas o partes llegan respecto de un asunto. Esa aprobación implicará una situación armónica entre las partes, una vez que se suscriba el mencionado acuerdo. Generalmente el acuerdo lo que hace es acercar posiciones que se encontraban distantes.
Las palabras sabias satisfacen igual que una buena comida; las palabras acertadas traen satisfacción. Proverbios 18:20
Hablando tranquilamente se puede llegar a un acuerdo, donde ambas personas salgan privilegiadas. Debemos educar a nuestros hijos en el diálogo y la comunicación para resolver los conflictos que le sucedan en la vida diaria, ya que es la mejor opción para llegar a una acuerdo.
Además os digo, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan aquí en la tierra, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. (Mateo 18:19)
Es mejor llegar a un acuerdo a tiempo, que emprender una guerra interminable. Nunca llegues a un acuerdo sin meditar bien los resultados al futuro, pídele a Dios que te guíe en tus decisiones antes de aceptarlas, recuerda que es mejor decir un No a a tiempo, que un Si por el cual te puedes arrepentir toda tu vida. Tu carácter definirá el acuerdo y sera el que te hará poder definir un buen resultado. No cedas sin consultar en tu interior lo que te pueda quitar La Paz.
¡Los buenos acuerdos traen éxito, mas los malos acuerdos ruinas!.
ORACIÓN .
Señor. Ayúdame a ponerme de acuerdo con mis adversarios, dame la sabiduría para resolver cualquier mal entendido y poder estar en paz.