Yo quisiera saber cuándo en la vida es legítimo decir:
«no puedo más». Cuándo la última fuerza
de que el cuerpo es capaz, cuándo el esfuerzo límite y el cansancio final, cuándo el deber pararse y tener la humildad de decir: «sigue tú, que yo no puedo más». Porque decirlo es fácil ¿pero será verdad
que es la medida máxima de lo que puedo dar?.
Todos hemos sentido el cansancio en algunas ocaciones de nuestra vida, mas el resultado de este es el agotamiento cuando estamos afrontando circunstancias difíciles, esto nos conlleva a la falta de energía, donde nuestro cuerpo reacciona exhausto, y nos lleva a sentirnos débiles. El cansancio es una sensación extrema de agotamiento o falta de energía, a menudo descrita como estar extenuado. Las personas presentan este cansancio incluso cuando parecen estar durmiendo lo suficiente.
Hay diferentes formas que lo producen como:
EL FÍSICO. Cuando hacemos muchas actividades ya sea en el trabajo o cargamos con mucho peso sobre nuestro cuerpo y este se debilita.
EL EMOCIONAL . Es cuando estamos cansados de vivir de una manera incorrecta o con alguien que a toda hora esta perturbando nuestra vida.
EL ESPIRITUAL. Es cuando hemos perdido toda nuestra esperanza y nos dejamos llevar por el vencimiento de debilidad , donde nuestra batalla en la mente se hace fuerte y nuestra fe se desvanece.
Mas analicemos esta palabras del evangelio.
Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso. Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque yo soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma. Pues mi yugo es fácil de llevar y la carga que les doy es liviana». Mateo 11:28-30.
Esto fue lo que nos expreso en esta promesa de vida.
Que debemos de acércanos a El creyéndole cuando estemos cansados, sabiendo que su Palabra es vida y fortalece todos nuestros huesos. Esto nos hablo el apóstol Pablo en su carta a los Colosenses .
Por lo tanto, de la manera que recibieron a Cristo Jesús como Señor, ahora deben seguir sus pasos. Arráiguense profundamente en él y edifiquen toda la vida sobre él. Entonces la fe de ustedes se fortalecerá en la verdad que se les enseñó, y rebosarán de gratitud. Colosenses 2:6-7.
Cuando nuestras cargas de pensamientos y emociones nos debilitan, debemos de soltárselas a Él, que por medio del sacrificio en el cruz, las llevará fuera de nuestra de nuestra vida, para traernos descanso y fortaleza. Estas cargas las podemos identificar con el pecado, el cual se hace fuerte y pesado por no reconocerlo.
Estas son algunas de ellas: Como es el de la falta de perdonar a quienes nos hicieron daño, el rencor, la envidia, el orgullo y los malos comportamientos . Estas se han hecho cargas pesadas en nuestra mente y debilitan nuestro cuerpo con enfermedades. Más la promesa de Jesucristo es traernos el descanso espiritual , con el cual podemos ser fortalecidos en nuestra vida.
¿Cómo no agotarnos si sabemos que estamos siendo tratados injustamente y no hay forma de vencer esa injusticia? ¿Cómo no sentir desfallecimiento emocional cuando vemos que nuestras finanzas están bajando o no encontramos solución a los problemas?. Esto nos trae cansancio. Más nuestro Señor nunca desfallece y su voluntad es inamovible. Él nunca dejará una tarea inconclusa.
Parte de nuestro desgaste debe ser colocado bajo la convicción de que nuestro Dios es más grande que la suma de todos nuestros problemas. A pesar de toda nuestra petulancia y vanagloria, somos, en realidad, seres pequeñísimos con una presencia temporal comparable con la humilde hierba del campo cuya existencia o inexistencia ni siquiera es tomada en consideración. Esto hablo el profeta Isaías
La hierba se seca y las flores se marchitan bajo el aliento del Señor. Y así sucede también con los seres humanos.La hierba se seca y las flores se marchitan, pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre». Isaías 40:7-8.
¿Se te a quitado el sueño, y te perturba el estrés en tu mente, debido a tantas preocupaciones que tienes y sientes que tu cuerpo ya no resiste?. El mejor tratamiento es el poder de la oración.
El apóstol Santiago nos invita a todos juntos por cansados que estemos, a que nos unamos en oración de fe, por el cual Dios hará grandes milagros de esperanza a nuestras vidas, dándonos descanso espiritual.
¿Alguno de ustedes está pasando por dificultades? Que ore. ¿Alguno está feliz? Que cante alabanzas. ¿Alguno está enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia, para que vengan y oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. Una oración ofrecida con fe, sanará al enfermo, y el Señor hará que se recupere; y si ha cometido pecados, será perdonado. Confiésense los pecados unos a otros y oren los unos por los otros, para que sean sanados. La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos. Santiago 5:13-16.
La oración del Padre nuestro, es la mejor forma de ver la fortaleza en en toda nuestra vida espiritual, ella abarca todo , trae el perdón, da esperanzan y sobre todo levanta nuestra fe. Para restaurar todo nuestro cansancio.
OREMOS
“Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. “Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. “Danos hoy el pan nuestro de cada día. “Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores. “Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén.”.