El poder clarificar propósitos, dandole un sentido a la vida. Nos ayudar a que cada prueba superada nos irá fortaleciendo. Y aunque las dificultades o adversidades nos mostrarán las partes más vulnerables, el hecho de aprender de ellas nos ayudará a avanzar con más seguridad y confianza.
Para aprender a saber que es una adversidad, debemos entender que es, y esta es la cualidad de adverso. Este término (adverso) refiere a algo o alguien que resulta desfavorable, contrario o enemigo. La adversidad, por lo tanto, es una situación difícil de sobrellevar. Puede considerarse como un infortunio o una situación desgraciada. Siempre que existe una adversidad se requiere de templanza y fortaleza para superarla. Por lo generar las adversidades son la formación del ser humano, en crecimiento y entendimiento de poder pasar las situaciones difíciles que afrontamos, ellas nos maduran como personas si las tomamos del lado positivo. Teniendo la actitud correcta para saberlas aceptar y pasarlas. Afrontar las adversidades a lo largo de nuestra vida es algo mas que un deseo o un propósito , es una necesidad, una obligación , que relaciona la mente y el corazón. Ahora bien, si hay algo que todos sabemos es que aplicar este enfoque y desplegar adecuados recursos del cambio no siempre es fácil. Como cuando perdemos un ser a quien amamos, una ruptura amorosa, o la perdida de un empleo. Estas nos pueden sumergir en una tristeza o depresión. Mas debemos de entender que todo lo que nos sucede tiene un propósito en la voluntad de Dios , por difícil que sea aceptarlas. Por esto hay quienes manejan sensaciones de culpabilidad y de derrota, cuando están atravesando una adversidad. Mas debemos de aprender a superar estos obstáculos que se nos presentan, actualizando y reconociendo en nuestra mente y pensamiento una realidad, para seguir adelante y poder dejarlas atrás, liberándonos de estas emociones para dejarlas en el pasado. Teniendo la actitud correcta para superarlas.
Sácianos por la mañana con tu misericordia, y cantaremos con gozo y nos alegraremos todos nuestros días. Alégranos conforme a los días que nos afligiste, y a los años en que vimos adversidad. Salmos 90:14-15.
En algunas situaciones la adversidad puede convertirse en lo contrario que desearíamos que ocurriera, ya que no toma en ocaciones desprevenidos, dejándonos en una situación preocupante, donde debemos saber que a medida que nos está ocurriendo, debemos de tener la capacidad de poder afrontarlas, para ser capaces de seguir adelante en la vida. Sabiendo que muchas de ellas llegan para aprender a ser formados y maduros.
Alégrate en el día de la prosperidad, y en el día de la adversidad considera: Dios ha hecho tanto el uno como el otro para que el hombre no descubra nada que suceda después de él. Eclesiastés 7:14.
Decimos de igual manera que nuestros enemigos son nuestros adversarios, que en muchas ocaciones somos atacados por ellos, que quieren destruirnos , causándonos adversidades. Mas no existe mayor enemigo que el que esta dentro de nosotros mismos en medio de las adversidades, como la capacidad de hundirnos en nuestras emociones , las cuales nos llevan a un estado anímico, que causa un desastre interno en nuestro ser , con el cual luchamos con el adversario del YO. Como yo que voy hacer, yo no puedo, yo no aguanto , yo estoy solo. Etcétera. Esta es donde el adversario nos puede vencer en medio de la adversidad. Y debemos de saber que si o fiamos en Dios , estas confecciones cambian, ya que aprenderemos a decir. Gracias, danos esperanzas y auméntanos la fe para mover montañas. Y si podrás superar las adversidades positivamente. Ahora hay quienes buscan las adversidades, rebelándose en contra de la justicia de Dios y aun de los hombres, desafiando todo lo adverso de la vida, se dejan llevar por una condición de pescado, donde solo desean vivir una vida desorganizada, que solo les causa daño y adversidades. Mas solo podrán salir de ellas si reconocen el error y se humillan delante de Dios , para pedirle perdón , por sus malas formas de actuar y caminar que los llevo a sufrir esas adversidades. Así sera librada el alma y podrá vivir en paz.
Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que El os exalte a su debido tiempo, echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros. Sed de espíritu sobrio, estad alerta. Vuestro adversario, el diablo, anda al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar. 1 Pedro 5:6-8.
En medio de tu adversidad Dios te librará, si te depositas y confías en Su supremacía.
ORACIÓN:
En mi adversidad, levanto mis ojos al cielo, reconociendo al gran Dios creador, que por medio de su hijo Jesucristo, nos ayudará y nos fortalecerá, para poder superar la gran situación que estoy viviendo. Amén.