Cuando se expresa un verdad, con honestidad y trasparencia, el efecto puede causar una gran impresión de franqueza y naturalidad llena de buena fe.
La sinceridad es una virtud que pueden poseer muchos seres humanos , es un valor o principio que hasta puede llegar a definir la personalidad de un individuo, no se trata únicamente de decir la verdad, va más allá, la sinceridad es una actitud que trasciende en el tiempo y afecta el modo de actuar, de expresarse además de afectar el estado de ánimo, pues al ser una persona sincera te sientes bien contigo mismo. Ese comportamiento te lleva a tener una buena actitud y un carácter definido.
Podemos decir con confianza y con una conciencia limpia que, en todos nuestros asuntos, hemos vivido en santidad y con una sinceridad dadas por Dios. Hemos dependido de la gracia de Dios y no de nuestra propia sabiduría humana. Esa es la forma en que nos hemos comportado ante el mundo y en especial con ustedes. 2 Corintios 1:12.
La sinceridad es la verdad manifiesta de lo que verdaderamente sentimos, se trasmite con transparencia y honestidad de si mismo, dejando saber lo más profundo de su corazón a una respuesta.
Ahora que he comenzado a hablar, déjame continuar. Hablo con toda sinceridad; digo la verdad. El Espíritu de Dios me ha creado, y el aliento del Todopoderoso me da vida. Job 33:2 -4.
El hecho de ser una persona ser sincera conlleva a querer demostrar ante el mundo entero sin prejuicios propios como eres en realidad y nace el deseo de querer decir la verdad en todo momento sin importar nada ni nadie. Es dejar atrás todo tipo de mentira o hipocresía, debido a que se siente un gran respeto por la verdad, ser una persona sincera sobre todo consigo mismo te convierte en un individuo con la capacidad de ser honesto ante toda verdad. Existe un gran dicho que dice. ¡ es mejor ponerse rojo por un minuto , que no pálido por toda una vida!. Esto causa la sinceridad si la expresa, mas si la ocultas solo tú sufrirás.
Después de una larga enfermedad, una mujer muere y llega a las puertas del cielo.Mientras espera por San Pedro, ella ve a través de las rejas a sus padres, amigos y todos los que habían partido antes que ella, sentados a una mesa, apreciando un banquete maravilloso. Cuando San Pedro llega, ella le comenta : Qué lugar tan lindo! ¿Cómo hago para entrar ? Yo voy a decirte una palabra. Si la deletreas correctamente la primera vez, entras; si te equivocas, vas directo al infierno, respondió San Pedro. Ok, ¿cuál es la palabra?. -AMOR. -Ella la deletreó correctamente y pasó por los portones. Un par de años después, San Pedro le pidió que vigilase los portones por ese día. Para su sorpresa, aparece el que fue su marido. – Hola, qué sorpresa! – dice ella. -¿Cómo estás?. – Ah…., pues he estado muy bien desde que falleciste. Me casé con aquella bella enfermera que te cuidó, gané la lotería y me hice millonario. Entonces vendí la casa donde vivíamos y compré una mansión en el barrio alto que siempre te gustó. Viajé con mi nueva esposa por Europa, Asia y Oceanía. Estábamos de vacaciones en Los Alpes justamente cuando decidí esquiar. Me caí…, el esquí me cayó en la cabeza y aquí estoy. ¿Cómo hago para entrar querida?. – Yo voy a decirte una palabra. Si la deletreas correctamente la primera vez puedes entrar, si no, vas directo al infierno respondió ella. – OK, ¿cuál es la palabra?. – SCHWARZENNEGGER!!!!!.
La sinceridad es una verdad expresada, que te conlleva a decir la verdad, No se puede exigir algo que no se da, es decir, para poder esperar que aquellos que te rodean sean sinceros se debe empezar por sí mismo. Cuando somos sinceros para con Dios , entonces se producen los milagros de la vida, ya que se manifiesta la fe, que llena toda esperanza.
Entonces la mujer, temerosa y temblando, dándose cuenta de lo que le había sucedido, vino y se postró delante de El y le dijo toda la verdad. Y Jesús le dijo: Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz y queda sana de tu aflicción. (Marcos 5:33-34).
La sinceridad es uno de los valores que toman mayor estimación debido a que refleja la honestidad presente en una persona.
ORACIÓN
Concédeme Señor la capacidad de ser sincero con migo mismo, para poder ser honesto con los demás. Muéstrame mi interior para desarrollar la sinceridad del alma. Amén.